No hace falta decir que la industria discográfica ya no es una industria, sino un tira y afloje entre empresarios que no quieren aceptar que la tecnología los comió. U2 se sumó a las movidas de bandas como Radiohead o Nine Inch Nails y regaló su disco a través de iTunes. El tema es que el disco fue bajado por miles de usuarios que no lo querían, fue una imposición del software, y borrarlo era difícil. Tan difícil que se hizo una aplicación para eliminarlo de manera sencilla. Año 2014 y las cosas vienen bien: nadie quiere los discos de U2, ni siquiera gratis.
Ya en los ochenta, con la aparición del Sony Walkman, la banda regalaba su cassette del disco War. El tiempo pasa, la estrategia es la misma y nadie quiere a U2.